El periodista estadounidense Jack Belden predijo la victoria del PCCh
En 1933, el periodista estadounidense Jack Belden viajó a través del océano Pacífico a China, donde permaneció nueve años como corresponsal de guerra guiado por su curiosidad sobre el PCCh. Belden presenció el sufrimiento y la furia del pueblo chino, así como la revolución democrática liderada por el PCCh. A través de entrevistas realizadas tanto a los jefes civiles y militares como a ciudadanos comunes, presentó un relato veraz de la Guerra de Resistencia contra la Agresión Japonesa y la Guerra de Liberación, y registró historias conmovedoras sobre la profunda conexión entre el Partido y el pueblo, dando así respuesta a dos grandes interrogantes:“¿Por qué triunfó la revolución china?”y“¿Por qué el PCCh consiguió el poder político?”.
Para explicar la primera pregunta, Belden relató un vívido episodio de la guerra de guerrillas en la retaguardia enemiga y de los comunistas que llevaron la revolución al éxito. Con un sencillo estilo, escribió cómo las tropas japonesas realizaban búsquedas de puerta en puerta en los campos de la guerra de guerrillas, lo que hacía imposible la vida al pueblo. Escribió sobre cómo la inacción de las tropas del Guomindang provocó manifestaciones populares de descontento. A diferencia de los funcionarios del Guomindang que presentaban una gran apariencia con uniformes intimidantes y tenían guardias armados en las entradas, el ejército del PCCh resistía con intrepidez a los invasores japoneses, sin temer penalidades ni sacrificios, por lo que se ganaron la confianza y el afecto del pueblo con disciplina, sinceridad y fe en la victoria. Belden también relató sobre cómo la población local, atraída por los mismos ideales revolucionarios, acogió con entusiasmo al ejército comunista sin escatimar esfuerzos para ofrecerle garantías en la retaguardia del enemigo. Belden se dio cuenta de que el pueblo ya no le tenía miedo al gobierno y que, a la vez, el gobierno ya no era la clase gobernante que se encontraba por encima de las masas. Por el contrario, los miembros del PCCh se habían convertido en parientes y compañeros confiables. Claramente, la victoria del PCCh fue la elección de la historia y del pueblo.
En cuanto a la segunda pregunta, Belden consideró que el PCCh pudo conseguir el poder político no solo por su victoria militar, sino porque también resolvió el problema de la tierra que había angustiado durante mil años a China, logrando así el sueño de que“la tierra es para el que la trabaja”. Como testigo de la Revolución Agraria, Belden escribió en su libro:“Los terratenientes y campesinos ricos, el 10% de la población total, poseían del 55% al 65% de la tierra. Para cambiar esta situación, el PCCh emitió el 4 de mayo de 1946 la Directiva Acerca del Problema Agrario, en la que respaldó decididamente la lucha del pueblo por arrebatarles las tierras a los terratenientes a través de la denuncia a los colaboracionistas, el ajuste de cuentas, la reducción de las rentas y la devolución de los arriendos e intereses”. Mediante una investigación profunda de la sociedad china, Belden alcanzó una comprensión completamente nueva del PCCh. Entonces, pudo demostrarle al mundo que el PCCh no había obtenido el poder político por casualidad, sino ganándose la simpatía del pueblo chino y representando los intereses fundamentales de las masas populares.
A los ojos de Jack Belden y muchos otros periodistas extranjeros que fueron testigos de la revolución china, el PCCh se ganó la simpatía del pueblo con una lucha persistente que despertó su esperanza y confianza.“De esta manera, estableció un aparato estatal que proviene de las masas y las sirve”. En 1949, Belden publicó su obra más famosa China sacude al mundo ( China Shakes the World ). Ante las críticas de algunos de los llamados“expertos en temas de China”, Belden citó la famosa profecía atribuida a Napoleón:“China es un gigante dormido. Déjenlo dormir porque cuando despierte, el mundo se sacudirá”.
Los informes de Jack Belden sobre el Nuevo 4.º Cuerpo de Ejército se publicaron en el vespertino The Shanghai Evening Post and Mercury en diciembre de 1938.